Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

2 Corintios 5:1-6 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

1. Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshace, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna, en los cielos.

2. Y en ésta también gemimos, deseando ser revestidos de aquélla, nuestra habitación celestial,

3. puesto que en verdad seremos hallados vestidos, y no desnudos.

4. Porque asimismo los que estamos en este tabernáculo, gemimos agobiados, porque no quisiéramos ser desnudados, sino revestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida.

5. Mas el que nos hizo para esto mismo es Dios, quien nos ha dado la garantía del Espíritu.

6. Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que estamos en el cuerpo, peregrinamos ausentes del Señor

Leer capítulo completo 2 Corintios 5