33. Del mismo modo, cuando vean que todo está pasando como les he dicho, sabrán que pronto vendré de nuevo.
34. Les aseguro que todo esto pasará antes de que mueran algunos de los que ahora están vivos.
35. El cielo y la tierra dejarán de existir, pero mis palabras permanecerán para siempre.
36. »Nadie sabe el día ni la hora en que yo vendré; no lo saben ni siquiera los ángeles del cielo. Es más, tampoco yo lo sé. Sólo Dios, mi Padre, lo sabe.