9. ustedes nos preguntan acerca del hombre que estaba enfermo, y que ahora está sano.
10. Ustedes y toda la gente de Israel deben saber que este hombre está aquí, completamente sano, gracias al poder de Jesús de Nazaret, el Mesías. Ustedes ordenaron que a Jesús lo mataran en una cruz, pero Dios lo ha resucitado.
11. Ustedes han actuado como los constructores que rechazaron una piedra, y luego resultó que esa piedra llegó a ser la piedra principal que sostiene todo el edificio.
12. Sólo Jesús tiene poder para salvar. Sólo él fue enviado por Dios, y en este mundo sólo él tiene poder para salvarnos.
13. Todos los de la Junta Suprema se sorprendieron de oír a Pedro y a Juan hablar sin ningún temor, a pesar de que eran hombres sencillos y de poca educación. Se dieron cuenta entonces de que ellos habían andado con Jesús.
14. Y no podían acusarlos de nada porque allí, de pie junto a ellos, estaba el hombre que había sido sanado.
15. Los de la Junta ordenaron sacar de la sala a los acusados, y se pusieron a discutir entre ellos.
16. «¿Qué vamos a hacer?», se decían. «No podemos acusarlos de mentirosos, pues lo que hicieron por ese hombre es realmente un milagro, y todos en Jerusalén lo saben.»Otros decían:
17. «Debemos impedir que lo sepa más gente. Tenemos que amenazarlos para que dejen de hablar del poder de Jesús.»
18. Así que los llamaron y les ordenaron:—No le digan a nadie lo que ha pasado, y dejen de enseñar a la gente acerca del poder de Jesús.
19. Pero Pedro y Juan les respondieron:—Dígannos, entonces: ¿debemos obedecerlos a ustedes antes que a Dios?
20. ¡Nosotros no podemos dejar de hablar de todo lo que hemos visto y oído!