1. Los que tienen esclavos, deben ser amos justos y tratar bien a sus esclavos. Recuerden que en el cielo también tienen un Amo, que es el Señor Jesucristo.
2. Dediquen siempre tiempo a la oración, y den gracias a Dios.
3. Oren también por nosotros, y pídanle a Dios que podamos anunciar libremente el mensaje y explicar el plan secreto de Cristo. Precisamente por anunciarlo estoy ahora preso.
4. Pídanle a Dios que yo pueda explicar ese mensaje con toda claridad.
5. Usen su inteligencia para tratar como se debe a los que no confían en Cristo. Aprovechen bien cada oportunidad que tengan
6. de conversar con ellos. Hablen siempre de cosas buenas, díganlas de manera agradable, y piensen bien cómo se debe contestar a cada uno.
7. Tíquico, fiel seguidor de Cristo y compañero nuestro, les contará todo lo que tiene que ver conmigo. Él siempre me ha ayudado, y juntos hemos servido al Señor.
8. Por eso mismo lo estoy enviando a ustedes, para que les dé ánimo y les diga cómo estamos.