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Jeremías 38:8-23 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)

8. Ébed-mélec salió del palacio real y fue a decirle al rey:

9. —Su Majestad, esta gente está tratando a Jeremías con mucha crueldad. Lo han echado en el pozo, y allí se va a morir de hambre, pues ya no se consigue pan en la ciudad.

10. Entonces el rey le ordenó:—Bien, Ébed-mélec. Busca a tres hombres, y diles que te ayuden a sacar de allí a Jeremías, antes de que se muera.

11. Ébed-mélec fue entonces con aquellos hombres, y del depósito de ropa del palacio real sacó ropas y trapos viejos. Luego ató toda esa ropa y la bajó hasta el fondo del pozo, donde estaba yo.

12. Entonces me dijo:—Jeremías, colócate estos trapos bajo los brazos, para que las sogas no te lastimen.Yo seguí sus instrucciones,

13. y aquellos hombres tiraron de las sogas y me sacaron del pozo. A partir de ese momento, me quedé en el patio de la guardia.

14. Poco tiempo después, el rey Sedequías ordenó que me llevaran a la tercera entrada del templo, y allí me dijo:—Jeremías, quiero preguntarte algo, y espero que me digas todo lo que sepas.

15. Yo le contesté:—No tiene caso; cualquiera que sea mi respuesta, usted me mandará a matar; y si le doy un consejo, no me va a hacer caso.

16. Pero, sin que nadie se diera cuenta, el rey me hizo este juramento:—¡No pienso matarte, ni tampoco pienso dejar que te maten! ¡Eso te lo juro por el Dios que nos ha dado la vida!

17. Entonces le dije:—El Dios todopoderoso asegura que, si todos ustedes se rinden ante los jefes del rey de Babilonia, tanto Su Majestad como su familia se salvarán de morir, y evitará que le prendan fuego a la ciudad.

18. Si no se rinden, entonces el ejército babilonio conquistará la ciudad y le prenderá fuego, y usted no podrá escapar.

19. El rey Sedequías me respondió:—Francamente, tengo miedo de los judíos que se han unido a los babilonios. Si llego a caer en sus manos, no me irá nada bien.

20. Yo le aseguré:—Dios ha dicho que si Su Majestad obedece, todo saldrá bien y esos judíos no le harán ningún daño.

21. Por el contrario, si Su Majestad no se rinde ante los babilonios,

22. todas las mujeres que aún quedan en su palacio caerán en manos de los jefes del rey de Babilonia. Entonces esas mismas mujeres le dirán a Su Majestad:“Tus amigos te engañaron y te vencieron.¡Eso te pasa por confiar en ellos!Tus amigos te abandonaron por completo,y ahora estás con el agua hasta el cuello”.

23. »Todas las mujeres y los hijos de Su Majestad caerán bajo el poder de los babilonios, y la ciudad será quemada. ¡Ni siquiera usted logrará escapar!

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