Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Jeremías 3:5-17 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)

5. También me pediste calmar mi enojo,pero no hablabas en serio,pues seguiste haciendo lo malo».

6. Cuando Josías era rey, Dios me dijo:«Jeremías, ¿te has fijado en lo que ha hecho mi pueblo Israel? Se ha comportado como una esposa infiel. En los cerros altos y bajo la sombra de cualquier árbol adora a dioses extraños.

7. Después de todo lo malo que había hecho, pensé que se arrepentiría y volvería conmigo; pero no lo hizo. Y el pueblo de Judá se ha comportado igual.

8. Aunque supo que yo rechacé a Israel, me fue infiel y me puso en vergüenza al adorar a otros dioses.

9. »A Israel no le importó traicionarme; al contrario, contaminó el país y me ofendió al adorar ídolos hechos de piedra y de madera.

10. Para colmo de males, Judá quiso engañarme diciendo que se había arrepentido. Pero no era verdad. Yo les juro que así fue».

11. Dios también me dijo:«Jeremías, aunque Israel me fue infiel, al fin de cuentas resultó ser mejor que Judá.

12-13. Así que dirígete al norte y anuncia este mensaje:“Israel, pueblo infiel, ¡vuélvete a mí!Me olvidaré por completo de mi enojo,y te recibiré con los brazos abiertos,porque soy un Dios bondadoso.Tan sólo te pido que reconozcas tu culpa,que admitas que te rebelaste contra mí,que no has querido obedecerme,y que bajo la sombra de cualquier árbolhas adorado a otros dioses.Te juro que así es”.

14. »¡Vuelvan a mí, israelitas rebeldes! ¡Ustedes son mis hijos! De cada ciudad tomaré a uno de ustedes, y de cada familia tomaré a dos, y los traeré a Jerusalén.

15. Yo les daré gobernantes que actúen como a mí me gusta, para que los guíen con sabiduría y con inteligencia.

16. »En el futuro, cuando ustedes hayan poblado el país, no se hablará más del cofre del pacto, ni nadie volverá a acordarse de él. Tampoco volverá a fabricarse uno nuevo, porque ya no será necesario. Les juro que así será.

17. »Cuando llegue ese día, la ciudad de Jerusalén será conocida como “el trono de Dios”. Todas las naciones vendrán a Jerusalén para adorarme, y ya no se dejarán llevar por los malos deseos de su necio corazón.

Leer capítulo completo Jeremías 3