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Génesis 38:20-29 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)

20. Más tarde, cuando Judá mandó a su amigo Hirá para entregar el cabrito y recoger lo que le había dejado a Tamar, su amigo ya no la encontró.

21. Entonces les preguntó a los que vivían allí:—¿Dónde está la prostituta que acostumbra sentarse junto al camino de Enaim?Ellos contestaron:—Aquí nunca ha habido ninguna prostituta.

22. El amigo de Judá regresó y le dijo:—No encontré a esa mujer. Los de ese lugar me aseguran que allí no ha habido ninguna prostituta.

23. Judá respondió:—¡Pues que se quede con todo! Pero nadie podrá decir que no cumplo mi palabra. Yo te envié con el cabrito, y tú ya no la encontraste.

24. Como a los tres meses, alguien fue a decirle a Judá:—Seguramente tu nuera Tamar ha tenido relaciones con alguien, pues resulta que está embarazada.Entonces Judá exclamó:—¡Échenla fuera, y quémenla viva!

25. Cuando la estaban sacando, Tamar mandó a decirle a su suegro: «El dueño de todo esto fue quien me dejó embarazada. Fíjate bien, tal vez sepas quién es el dueño».

26. En cuanto Judá reconoció su sello y la vara, dijo:—El culpable soy yo, y no ella, pues no quise darle a mi hijo Selá como esposo.Y nunca más Judá volvió a tener relaciones sexuales con Tamar.

27. Tiempo después, Tamar tuvo mellizos.

28. Al momento de nacer, uno de los mellizos sacó la mano; entonces la mujer que ayudaba a Tamar le ató al niño una cinta roja en la muñeca y dijo: «Éste nació primero».

29. Pero el niño volvió a meter la mano, y el que nació primero fue el otro mellizo. Entonces dijo la mujer: «¡Vaya, te abriste paso!» Por eso le pusieron por nombre Fares.

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