1. Dios le dijo a Jacob: «Cuando estabas huyendo de tu hermano Esaú, yo me aparecí a ti en Betel. Así que regresa a Betel, quédate a vivir allá, y constrúyeme un altar».
2. Jacob entonces les ordenó a sus familiares y a todos los que vivían con él:«Desháganse de todos esos dioses extraños en los que han creído. Luego báñense y cámbiense de ropa,
3. porque debemos ir a Betel para presentarnos ante Dios. Allá construiré un altar, para darle gracias, pues cuando estuve en problemas, él me ayudó. Por dondequiera que he andado, Dios siempre ha estado conmigo».