13. »Yo lanzaré mi red sobre el rey, y lo llevaré preso a Babilonia. Pero no llegará a ver ese país, pues morirá antes de llegar.
14. A los guardias que lo protegen los dispersaré por toda la tierra, y a su ejército lo perseguiré hasta destruirlo.
15. Y cuando se encuentren dispersos entre las naciones, reconocerán que yo soy Dios.
16. »Dejaré que algunos de ellos queden con vida. Sobrevivirán a la guerra, al hambre y a las enfermedades, para que les cuenten a las naciones todas las maldades repugnantes que cometieron. Entonces reconocerán que yo soy Dios».