7. Asuero ya tenía doce años de reinar. En el mes de Abib de ese año, Amán echó suertes para saber en qué fecha debía llevar a cabo su plan, y le salió el mes de Adar.
8. Entonces Amán le dijo al rey Asuero:—Majestad, en su reino vive gente de otra raza. Se los encuentra uno por todos lados. Tienen leyes diferentes y no obedecen las órdenes de Su Majestad. No es conveniente dejarlos vivir en el reino.
9. Si a Su Majestad le parece bien, y ordena que sean destruidos, yo daré trescientos treinta mil kilos de plata a los administradores del tesoro del reino.