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2 Crónicas 36:15-22-23 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)

15. A pesar de eso, Dios amó a su pueblo y a su templo, y les envió muchos mensajeros para llamarles la atención.

16. Pero la gente siempre se burlaba de los mensajeros de Dios y de los profetas, y no les hacían caso. Y así siguieron hasta que Dios ya no aguantó más y, muy enojado, decidió castigarlos.

17. Dios hizo que Nabucodonosor atacara Jerusalén y la derrotara. El rey Nabucodonosor mató a los jóvenes en el templo, y luego mató a muchos de los habitantes de Jerusalén, sin importar si eran hombres o mujeres, niños o ancianos.

18. Nabucodonosor se llevó a Babilonia todos los utensilios y tesoros del templo de Dios. También se apoderó de los tesoros del rey y de sus asistentes.

19. Luego derribó la muralla de Jerusalén, les prendió fuego al templo de Dios y a los palacios, y destruyó todos los objetos de valor.

20. Los israelitas que quedaron con vida fueron llevados presos a Babilonia, donde fueron esclavos del rey y de sus descendientes. Así permanecieron, hasta que el reino de Persia se convirtió en un país poderoso y conquistó Babilonia.

21. Así fue como se cumplió lo que Dios había anunciado por medio del profeta Jeremías. El territorio de Judá quedó abandonado setenta años, y sólo así pudo disfrutar de paz.

22-23. En el primer año del gobierno de Ciro, rey de Persia, este rey dio la siguiente orden a todos los habitantes de su reino:«El Dios de los cielos, que es dueño de todo, me hizo rey de todas las naciones, y me encargó que le construya un templo en la ciudad de Jerusalén, que está en la región de Judá. Por tanto, todos los que sean de Judá y quieran reconstruir el templo, tienen mi permiso para ir a Jerusalén. ¡Y que Dios los ayude!»Ciro, rey de PersiaCon esta orden se cumplió la promesa que Dios había hecho por medio del profeta Jeremías.

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