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Santiago 3:2-10 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

2. Porque todos ofendemos en muchas cosas. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, que también puede con freno gobernar todo el cuerpo.

3. He aquí, nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y gobernamos todo su cuerpo.

4. Mirad también las naves, siendo tan grandes, y siendo llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por dondequiera que quisiere la gana del que gobierna.

5. Así también, la lengua es un miembro pequeñito, y se gloría de grandes cosas. He aquí, un pequeño fuego ¡cuán grande bosque enciende!

6. Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. Así es la lengua entre nuestros miembros que contamina todo el cuerpo, e inflama el curso de nuestro naturaleza, y es inflamada del infierno.

7. Porque toda naturaleza de bestias fieras, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma, y es domada por el ser humano;

8. pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, y está llena de veneno mortal.

9. Con ella bendecimos al Dios, y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, los cuales son hechos a la semejanza de Dios.

10. De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, no conviene que estas cosas sean así hechas.

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