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Hebreos 10:29-39 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

29. ¿Cuánto pensáis que será más digno de mayor castigo, el que hollare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del testamento en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia?

30. Sabemos quién es el que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo.

31. Horrenda cosa es caer en las manos del Dios viviente.

32. Pero traed a la memoria los días pasados en los cuales después de haber recibido la luz, sufristeis gran combate de aflicciones.

33. De una parte ciertamente con vituperios y tribulaciones fuisteis hechos espectáculo; y de otra parte hechos compañeros de los que estaban en tal estado.

34. Porque de mis prisiones también os resentisteis conmigo, y el robo de vuestros bienes padecisteis con gozo, conociendo que tenéis en vosotros una mejor sustancia en los cielos, y que permanece.

35. No perdáis pues esta vuestra confianza, que tiene grande remuneración de galardón;

36. porque la paciencia os es necesaria, para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa.

37. Porque aún, un poquito, y el que ha de venir vendrá, y no tardará.

38. Mas el justo vivirá por la fe; mas el que se retirare, no agradará a mi alma.

39. Pero nosotros no somos tales que nos retiremos para perdición, sino fieles para ganancia del alma.

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