15. Y os ruego, hermanos, (ya sabéis que la casa de Estéfanas es las primicias de Acaya, y que se han dedicado al ministerio de los santos,)
16. que vosotros os sujetéis a los tales, y a todos los que ayudan y trabajan.
17. Me regocijo de la venida de Estéfanas y de Fortunato y de Acaico, porque éstos suplieron vuestra ausencia.
18. Porque recrearon mi espíritu y el vuestro; reconoced pues a los tales.
19. Las Iglesias de Asia os saludan. Os saludan mucho en el Señor Aquila y Priscila, con la Iglesia que está en su casa.
20. Os saludan todos los hermanos. Saludaos los unos a los otros con ósculo santo.
21. La salutación de mí, Pablo, de mi mano.
22. El que no amare al Señor Jesús, el Cristo, sea anatema. Nuestro Señor ha venido.