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Josué 10:8-15 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

8. Y el SEÑOR dijo a Josué: No tengas temor de ellos; porque yo los he entregado en tu mano, y ninguno de ellos parará delante de ti.

9. Y Josué vino a ellos de repente, porque toda la noche subió desde Gilgal.

10. Y el SEÑOR los turbó delante de Israel, y los hirió con gran mortandad en Gabaón; y los siguió por el camino que sube a Bet-horón, y los hirió hasta Azeca y Maceda.

11. Y cuando iban huyendo de los israelitas, a la bajada de Bet-horón, el SEÑOR echó sobre ellos del cielo grandes piedras hasta Azeca, y murieron; muchos más murieron de las piedras del granizo, que los que los hijos de Israel habían muerto a cuchillo.

12. Entonces Josué habló al SEÑOR el día que el SEÑOR entregó al amorreo delante de los hijos de Israel, y dijo en presencia de los israelitas: Sol, detente en Gabaón; y tú, Luna, en el valle de Ajalón.

13. Y el sol se detuvo y la luna se paró, hasta tanto que la nación se vengó de sus enemigos. ¿No está escrito esto en el libro de la rectitud? Y el sol se paró en medio del cielo, y no se apresuró a ponerse casi un día entero.

14. Y nunca fue tal día antes ni después de aquél, escuchando el SEÑOR a la voz de un hombre; porque el SEÑOR peleaba por Israel.

15. Y Josué, y todo el pueblo con él, volvió al campamento en Gilgal.

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