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Job 9:20-35 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

20. Si yo me justificare, me condenará mi boca; si me predicare perfecto, él me hará inicuo.

21. Si yo me predicare imperfecto, no conozco mi alma; condenaré mi vida.

22. Una cosa resta es a saber que yo diga: Al perfecto y al impío él los consume.

23. Si es azote, mate de presto, y no se ría de la prueba de los inocentes.

24. La tierra es entregada en manos de los impíos, y él cubre el rostro de sus jueces. Si no es él el que lo hace , ¿quién es? ¿Dónde está?

25. Mis días han sido más ligeros que un correo; huyeron, y nunca vieron bien.

26. Pasaron con los navíos de Ebeh; o como el águila que se arroja a la presa.

27. Si digo: Quiero olvidar mi queja, dejaré mi aburrimiento, y me esforzaré.

28. Temo todos mis trabajos; sé que no me perdonarás.

29. Si yo soy impío, ¿para qué trabajaré en vano?

30. Aunque me lave con aguas de nieve, y aunque limpie mis manos con la misma limpieza,

31. aún me hundirás en el hoyo; y mis propios vestidos me abominarán.

32. Porque no es hombre como yo, para que yo le responda, y vengamos juntamente a juicio.

33. No hay entre nosotros árbitro que ponga su mano sobre nosotros ambos.

34. Quite de sobre mí su verdugo, y su terror no me perturbe.

35. Y hablaré, y no le temeré; porque en este estado no estoy en mí.

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