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Job 29:9-23 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

9. Los príncipes detenían sus palabras; ponían la mano sobre su boca;

10. la voz de los principales se ocultaba, y su lengua se pegaba a su paladar;

11. cuando los oídos que me oían, me llamaban bienaventurado, y los ojos que me veían, me daban testimonio.

12. Porque libraba al pobre que gritaba, y al huérfano que carecía de ayudador.

13. La bendición del que se iba a perder venía sobre mí; y al corazón de la viuda daba alegría.

14. Me vestía de justicia, y ella me cubría como un manto; y mi diadema era juicio.

15. Yo era ojos al ciego, y pies al cojo.

16. A los menesterosos era padre; y de la causa que no entendía, me informaba con diligencia.

17. Y quebraba los colmillos del inicuo, y de sus dientes hacía soltar la presa.

18. Y decía yo : En mi nido moriré, y como arena multiplicaré días.

19. Mi raíz está abierta junto a las aguas, y en mis ramas permanecerá rocío.

20. Mi honra se renueva conmigo, y mi arco se renueva en mi mano.

21. Me oían, y esperaban; y callaban a mi consejo.

22. Tras mi palabra no replicaban, mas mi razón destilaba sobre ellos.

23. Me esperaban como a la lluvia, y abrían su boca como a la lluvia tardía.

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