Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Jeremías 29:5-18 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

5. Edificad casas, y morad; y plantad huertos, y comed del fruto de ellos;

6. casaos, y engendrad hijos e hijas; dad mujeres a vuestros hijos, y dad maridos a vuestras hijas, para que paran hijos e hijas; y multiplicaos ahí, y no os hagáis pocos.

7. Y procurad la paz de la ciudad a la cual os hice traspasar, y rogad por ella al SEÑOR; porque en su paz tendréis también vosotros paz.

8. Porque así dijo el SEÑOR de los ejércitos, Dios de Israel: No os engañen vuestros profetas que están entre vosotros, ni vuestros adivinos; ni miréis a vuestros sueños que soñáis.

9. Porque falsamente os profetizan ellos en mi nombre; no los envié, dijo el SEÑOR.

10. Porque así dijo el SEÑOR: Cuando en Babilonia se cumplieren los setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para tornaros a este lugar.

11. Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dijo el SEÑOR, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

12. Entonces me invocaréis, y andaréis en mis caminos y oraréis a mí, y yo os oiré;

13. y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón.

14. Y seré hallado de vosotros, dijo el SEÑOR, y tornaré vuestra cautividad, y os juntaré de todos los gentiles, y de todos los lugares adonde os arrojé, dijo el SEÑOR; y os haré volver al lugar de donde os hice ser llevados.

15. Mas dijisteis: El SEÑOR nos despertó profetas en Babilonia.

16. Pero así dijo el SEÑOR, del rey que está sentado sobre el trono de David, y de todo el pueblo que mora en esta ciudad, de vuestros hermanos que no salieron con vosotros en cautiverio;

17. así dijo el SEÑOR de los ejércitos: He aquí envío yo contra ellos cuchillo, hambre, y pestilencia, y los pondré como los malos higos, que de malos no se pueden comer.

18. Y los perseguiré con espada, con hambre y con pestilencia; y los daré por escarnio a todos los reinos de la tierra, por maldición y por espanto, y por silbo y por afrenta a todos los gentiles a los cuales los arrojé;

Leer capítulo completo Jeremías 29