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Mateo 13:30-40 Reina Valera Gómez (RVG)

30. Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y en el tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; mas recoged el trigo en mi granero.

31. Otra parábola les relató, diciendo: El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo;

32. el cual a la verdad es la más pequeña de todas las semillas; mas cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, tal, que vienen las aves del cielo y anidan en sus ramas.

33. Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.

34. Todas estas cosas habló Jesús por parábolas a la multitud, y sin parábolas no les hablaba;

35. para que se cumpliese lo que fue dicho por el profeta que dijo: En parábolas abriré mi boca; Enunciaré cosas que han estado escondidas desde la fundación del mundo.

36. Entonces Jesús despidió a la multitud, y se fue a casa, y sus discípulos vinieron a Él, y le dijeron: Decláranos la parábola de la cizaña del campo.

37. Respondiendo Él les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre;

38. El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino; y la cizaña son los hijos del malo.

39. El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del mundo, y los segadores son los ángeles.

40. Así como la cizaña es recogida y quemada en el fuego; así será en el fin de este mundo.

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