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Marcos 7:22-37 Reina Valera Gómez (RVG)

22. los hurtos, las avaricias, las maldades, los engaños, las lascivias, el ojo maligno, la blasfemia, la soberbia, la insensatez.

23. Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre.

24. Y levantándose de allí, se fue a la región de Tiro y de Sidón; y entrando en una casa, quiso que nadie lo supiese; pero no pudo esconderse.

25. Porque una mujer, cuya hija tenía un espíritu inmundo, oyendo de Él, vino y se postró a sus pies.

26. Y la mujer era griega, sirofenicia de nación; y le rogaba que echase fuera de su hija al demonio.

27. Pero Jesús le dijo: Deja que primero se sacien los hijos, porque no está bien quitar el pan de los hijos y echarlo a los perrillos.

28. Y ella respondió y le dijo: Sí, Señor, pero aun los perrillos debajo de la mesa, comen de las migajas de los hijos.

29. Entonces le dijo: Por esta palabra, ve; el demonio ha salido de tu hija.

30. Y cuando ella llegó a su casa, halló que el demonio había salido, y a su hija acostada sobre la cama.

31. Y saliendo otra vez de la región de Tiro y de Sidón, vino al mar de Galilea, a través de las costas de Decápolis.

32. Y le trajeron a uno que era sordo y tartamudo, y le rogaron que pusiera su mano sobre él.

33. Y tomándole aparte de la multitud, metió sus dedos en las orejas de él, y escupiendo, tocó su lengua;

34. y alzando los ojos al cielo, gimió, y le dijo: Efata; que es: Sé abierto.

35. Y al instante sus oídos fueron abiertos, y fue suelta la atadura de su lengua, y hablaba bien.

36. Y les mandó que no lo dijesen a nadie; pero cuanto más les mandaba, tanto más y más lo divulgaban.

37. Y se maravillaban en gran manera, diciendo: Todo lo ha hecho bien; hace a los sordos oír y a los mudos hablar.

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