Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Hebreos 1:8-14 Reina Valera Gómez (RVG)

8. Mas al Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por siempre jamás: Cetro de equidad es el cetro de tu reino.

9. Has amado la justicia, y aborrecido la maldad; Por tanto Dios, el Dios tuyo, te ha ungido con óleo de alegría más que a tus compañeros.

10. Y: Tú, Señor, en el principio fundaste la tierra, y los cielos son obra de tus manos:

11. Ellos perecerán, mas tú permaneces; y todos ellos se envejecerán como una vestidura;

12. y como un manto los envolverás, y serán mudados; pero tú eres el mismo, y tus años no acabarán.

13. Y, ¿a cuál de los ángeles dijo jamás: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?

14. ¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de salvación?

Leer capítulo completo Hebreos 1