1. Así, pues, nosotros, como sus colaboradores, os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios.
2. Porque dice: En tiempo aceptable te he oído, y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable, he aquí ahora el día de salvación.
3. No dando a nadie ninguna ocasión de tropiezo, para que el ministerio no sea vituperado;
4. antes, aprobándonos en todo como ministros de Dios, en mucha paciencia, en tribulaciones, en necesidades, en angustias;
5. en azotes, en cárceles, en tumultos, en trabajos, en vigilias, en ayunos;
6. en pureza, en ciencia, en longanimidad, en bondad, en el Espíritu Santo, en amor no fingido;