Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Salmos 28:1-2 Reina Valera Gómez (RVG)

1. «Salmo de David» A ti clamaré, oh Jehová, Roca mía; no te desentiendas de mí; Para que no sea yo, dejándome tú, semejante a los que descienden a la fosa.

2. Oye la voz de mis ruegos cuando a ti clamo, cuando alzo mis manos hacia tu santo templo.

Leer capítulo completo Salmos 28