Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Salmos 139:16-24 Reina Valera Gómez (RVG)

16. Mi embrión vieron tus ojos, siendo aún imperfecto; y en tu libro estaban escritos todos mis miembros, que fueron luego formados, cuando aún no existía ni uno de ellos.

17. ¡Qué preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán grande es la suma de ellos!

18. Si los contara, serían más numerosos que la arena; al despertar aún estoy contigo.

19. De cierto, oh Dios, matarás al impío; apartaos, pues, de mí, hombres sanguinarios.

20. Porque blasfemias dicen ellos contra ti; tus enemigos toman en vano tu nombre.

21. ¿No odio, oh Jehová, a los que te aborrecen, y me enardezco contra tus enemigos?

22. Los aborrezco con perfecto odio; los tengo por enemigos.

23. Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos:

24. Y ve si hay en mí camino de perversidad, y guíame en el camino eterno.

Leer capítulo completo Salmos 139