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Salmos 119:92-106 Reina Valera Gómez (RVG)

92. Si tu ley no hubiese sido mi delicia, ya en mi aflicción hubiera perecido.

93. Nunca jamás me olvidaré de tus mandamientos; porque con ellos me has vivificado.

94. Tuyo soy yo, guárdame; porque he buscado tus mandamientos.

95. Los impíos me han aguardado para destruirme; mas yo consideraré tus testimonios.

96. A toda perfección he visto fin; extenso sobremanera es tu mandamiento.

97. MEM. ¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación.

98. Me has hecho más sabio que mis enemigos con tus mandamientos; porque siempre están conmigo.

99. Más que todos mis enseñadores he entendido; porque tus testimonios son mi meditación.

100. Más que los viejos he entendido, porque he guardado tus mandamientos.

101. De todo mal camino contuve mis pies, para guardar tu palabra.

102. No me aparté de tus juicios; porque tú me enseñaste.

103. ¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! Más que la miel a mi boca.

104. De tus mandamientos he adquirido inteligencia; por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.

105. NUN. Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.

106. Juré y ratifiqué que he de guardar tus justos juicios.

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