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Salmos 119:112-127 Reina Valera Gómez (RVG)

112. Mi corazón incliné a poner por obra tus estatutos de continuo, hasta el fin.

113. SAMEC. Los pensamientos vanos aborrezco; mas amo tu ley.

114. Mi escondedero y mi escudo eres tú; en tu palabra he esperado.

115. Apartaos de mí, malignos; pues yo guardaré los mandamientos de mi Dios.

116. Susténtame conforme a tu palabra, y viviré; y no dejes que me avergüence de mi esperanza.

117. Sostenme, y seré salvo; y me deleitaré siempre en tus estatutos.

118. Hollaste a todos los que se desvían de tus estatutos; porque mentira es su engaño.

119. Como escorias hiciste consumir a todos los impíos de la tierra; por tanto yo he amado tus testimonios.

120. Mi carne se ha estremecido por temor de ti; y de tus juicios tengo miedo.

121. AIN. Juicio y justicia he hecho; no me abandones a mis opresores.

122. Responde por tu siervo para bien; no permitas que me opriman los soberbios.

123. Mis ojos desfallecieron por tu salvación, y por el dicho de tu justicia.

124. Haz con tu siervo según tu misericordia, y enséñame tus estatutos.

125. Tu siervo soy yo, dame entendimiento; para que sepa tus testimonios.

126. Tiempo es de actuar, oh Jehová; porque han invalidado tu ley.

127. Por tanto, amo tus mandamientos más que el oro, y más que oro muy puro.

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