1. Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.
2. Cuanto más los llamaban, así ellos se iban de su presencia; a los Baales sacrificaban, y a los ídolos quemaban incienso.
3. Yo con todo enseñé a caminar a Efraín, tomándolo de los brazos; y no conocieron que yo los cuidaba.