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Job 37:18-24 Reina Valera Gómez (RVG)

18. ¿Extendiste tú con Él los cielos, firmes como un espejo sólido?

19. Muéstranos qué le hemos de decir; porque nosotros no podemos ordenar nuestras ideas a causa de las tinieblas.

20. ¿Será preciso contarle cuando yo hablare? Por más que el hombre razone, quedará como abismado.

21. Y ahora no se puede mirar la luz esplendente en los cielos, luego que pasa el viento y los limpia,

22. viniendo de la parte del norte la dorada claridad. En Dios hay una majestad terrible.

23. Él es Todopoderoso, al cual no alcanzamos, grande en poder; y en juicio y en multitud de justicia no afligirá.

24. Lo temerán por tanto los hombres: Él no estima a ninguno que se cree ser sabio de corazón.

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