10. Por tanto, yo dije: Escuchadme; también yo declararé lo que pienso.
11. He aquí yo he esperado a vuestras razones, he escuchado vuestros argumentos, en tanto que buscabais palabras.
12. Os he prestado atención, y he aquí que no hay de vosotros quien redarguya a Job, y responda a sus razones.
13. Para que no digáis: Nosotros hemos hallado sabiduría: Lo derriba Dios, no el hombre.
14. Ahora bien, Job no dirigió contra mí sus palabras, ni yo le responderé con vuestras razones.
15. Se espantaron, no respondieron más; se les fueron los razonamientos.
16. Yo, pues, he esperado, porque no hablaban, antes pararon, y no respondieron más.
17. Por eso yo también responderé mi parte, también yo declararé mi juicio.
18. Porque lleno estoy de palabras, y el espíritu dentro de mí me constriñe.
19. De cierto mi vientre está como el vino que no tiene respiradero, y se rompe como odres nuevos.
20. Hablaré, pues, y respiraré; abriré mis labios, y responderé.
21. No haré ahora acepción de personas, ni usaré con hombre alguno de títulos lisonjeros.
22. Porque no sé hablar lisonjas; de otra manera en breve mi Hacedor me consumiría.