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Deuteronomio 8:4-11 Reina Valera Gómez (RVG)

4. Tu ropa nunca se envejeció sobre ti, ni el pie se te ha hinchado por estos cuarenta años.

5. Reconoce asimismo en tu corazón, que como castiga el hombre a su hijo, así Jehová tu Dios te castiga.

6. Guardarás, pues, los mandamientos de Jehová tu Dios, andando en sus caminos, y temiéndolo.

7. Porque Jehová tu Dios te introduce en la buena tierra, tierra de arroyos, de aguas, de fuentes, de abismos que brotan por vegas y montes;

8. tierra de trigo y cebada, y de vides, e higueras, y granados; tierra de olivos, de aceite, y de miel;

9. tierra en la cual no comerás el pan con escasez, no te faltará nada en ella; tierra que sus piedras son hierro, y cortarás bronce de sus montes.

10. Y comerás y te saciarás, y bendecirás a Jehová tu Dios por la buena tierra que te habrá dado.

11. Guárdate de que no te olvides de Jehová tu Dios, dejando de observar sus mandamientos, y sus derechos y sus estatutos que yo te ordeno hoy.

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