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Cantares 4:1-8 Reina Valera Gómez (RVG)

1. He aquí que tú eres hermosa, amada mía, he aquí que tú eres hermosa; tus ojos entre tus guedejas como de paloma; tus cabellos como rebaño de cabras, que se muestran desde el monte de Galaad.

2. Tus dientes como rebaño de ovejas trasquiladas que suben del lavadero, todas con crías mellizas, y ninguna entre ellas estéril.

3. Tus labios, como un hilo de grana, y tu habla hermosa; tus mejillas, como cachos de granada entre tus guedejas.

4. Tu cuello, como la torre de David, edificada para armería; mil escudos están colgados de ella, todos escudos de valientes.

5. Tus dos pechos, como mellizos de gacela, que se apacientan entre lirios.

6. Hasta que apunte el día y huyan las sombras, me iré al monte de la mirra, y al collado del incienso.

7. Toda tú eres hermosa, amada mía y en ti no hay mancha.

8. Ven conmigo del Líbano, oh esposa mía, ven conmigo del Líbano: Mira desde la cumbre de Amana, desde la cumbre de Senir y de Hermón, desde las guaridas de los leones, desde los montes de los leopardos.

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