30. Los de Babilonia hicieron a Sucot-benot, y los de Cuta hicieron a Nergal, y los de Hamat hicieron a Asima;
31. Los aveos hicieron a Nibhaz y a Tartac; y los de Sefarvaim quemaban sus hijos en el fuego como ofrenda a Adramelec y a Anamelec, dioses de Sefarvaim.
32. Y temían a Jehová; e hicieron del pueblo bajo sacerdotes de los lugares altos, quienes sacrificaban para ellos en los templos de los lugares altos.
33. Temían a Jehová, y honraban a sus dioses, según la costumbre de las gentes de donde habían sido trasladados.
34. Hasta hoy hacen como entonces; que ni temen a Jehová, ni guardan sus estatutos, ni sus ordenanzas, ni hacen según la ley y los mandamientos que prescribió Jehová a los hijos de Jacob, al cual puso el nombre de Israel;
35. Con los cuales había Jehová hecho pacto, y les mandó, diciendo: No temeréis a otros dioses, ni los adoraréis, ni les serviréis, ni les ofreceréis sacrificios.
36. Mas a Jehová, que os sacó de tierra de Egipto con grande poder y brazo extendido, a Éste temeréis, y a Éste adoraréis, y a Éste haréis sacrificio.
37. Los estatutos y derechos y ley y mandamientos que os dio por escrito, cuidaréis siempre de ponerlos por obra, y no temeréis a dioses ajenos.
38. Y no olvidaréis el pacto que hice con vosotros; ni temeréis a dioses ajenos: