Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Salmos 78:53-71 Reina-Valera Antigua (RVES)

53. Y guiólos con seguridad, que no tuvieron miedo; Y la mar cubrió á sus enemigos.

54. Metiólos después en los términos de su santuario, En este monte que ganó su mano derecha.

55. Y echó las gentes de delante de ellos, Y repartióles una herencia con cuerdas; E hizo habitar en sus moradas á las tribus de Israel.

56. Mas tentaron y enojaron al Dios Altísimo, Y no guardaron sus testimonios;

57. Sino que se volvieron, y se rebelaron como sus padres: Volviéronse como arco engañoso.

58. Y enojáronlo con sus altos, Y provocáronlo á celo con sus esculturas.

59. Oyólo Dios, y enojóse, Y en gran manera aborreció á Israel.

60. Dejó por tanto el tabernáculo de Silo, La tienda en que habitó entre los hombres;

61. Y dió en cautividad su fortaleza, Y su gloria en mano del enemigo.

62. Entregó también su pueblo á cuchillo, Y airóse contra su heredad.

63. El fuego devoró sus mancebos, Y sus vírgenes no fueron loadas en cantos nupciales.

64. Sus sacerdotes cayeron á cuchillo, Y sus viudas no lamentaron.

65. Entonces despertó el Señor á la manera del que ha dormido, Como un valiente que grita excitado del vino:

66. E hirió á sus enemigos en las partes posteriores: Dióles perpetua afrenta.

67. Y desechó el tabernáculo de José, Y no escogió la tribu de Ephraim.

68. Sino que escogió la tribu de Judá, El monte de Sión, al cual amó.

69. Y edificó su santuario á manera de eminencia, Como la tierra que cimentó para siempre.

70. Y eligió á David su siervo, Y tomólo de las majadas de las ovejas:

71. De tras las paridas lo trajo, Para que apacentase á Jacob su pueblo, y á Israel su heredad.

Leer capítulo completo Salmos 78