Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Salmos 42:1-7 Reina-Valera Antigua (RVES)

1. Al Músico principal: Masquil á los hijos de Coré. COMO el ciervo brama por las corrientes de las aguas, Así clama por ti, oh Dios, el alma mía.

2. Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo: ­Cuándo vendré, y pareceré delante de Dios!

3. Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, Mientras me dicen todos los días: ¿Dónde está tu Dios?

4. Acordaréme de estas cosas, y derramaré sobre mí mi alma: Cuando pasaré en el número, iré con ellos hasta la casa de Dios, Con voz de alegría y de alabanza, haciendo fiesta la multitud.

5. ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y te conturbas en mí? Espera á Dios; porque aun le tengo de alabar Por las saludes de su presencia.

6. Dios mío, mi alma está en mí abatida: Acordaréme por tanto de ti desde tierra del Jordán, Y de los Hermonitas, desde el monte de Mizhar.

7. Un abismo llama á otro á la voz de tus canales: Todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí.

Leer capítulo completo Salmos 42