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San Marcos 9:22-34 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

22. Y muchas veces le echa en el fuego y en el agua, para matarle; pero si puedes hacer algo, ten misericordia de nosotros, y ayúdanos.

23. Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.

24. E inmediatamente el padre del muchacho clamó y dijo: Creo; ayuda mi incredulidad.

25. Y cuando Jesús vio que la multitud se agolpaba, reprendió al espíritu inmundo, diciéndole: Espíritu mudo y sordo, yo te mando, sal de él, y no entres más en él.

26. Entonces el espíritu, clamando y sacudiéndole con violencia, salió; y él quedó como muerto, de modo que muchos decían: Está muerto.

27. Pero Jesús, tomándole de la mano, le enderezó; y se levantó.

28. Cuando él entró en casa, sus discípulos le preguntaron aparte: ¿Por qué nosotros no pudimos echarle fuera?

29. Y les dijo: Este género con nada puede salir, sino con oración y ayuno.

30. Habiendo salido de allí, caminaron por Galilea; y no quería que nadie lo supiese.

31. Porque enseñaba a sus discípulos, y les decía: El Hijo del Hombre será entregado en manos de hombres, y le matarán; pero después de muerto, resucitará al tercer día.

32. Pero ellos no entendían esta palabra, y tenían miedo de preguntarle.

33. Y llegó a Capernaum; y cuando estuvo en casa, les preguntó: ¿Qué disputabais entre vosotros en el camino?

34. Mas ellos callaron; porque en el camino habían disputado entre sí, quién había de ser el mayor.

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