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Salmos 35:8-25 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

8. Véngale el quebrantamiento sin que lo sepa,Y la red que él escondió lo prenda;Con quebrantamiento caiga en ella.

9. Entonces mi alma se alegrará en Jehová;Se regocijará en su salvación.

10. Todos mis huesos dirán: Jehová, ¿quién como tú,Que libras al afligido del más fuerte que él,Y al pobre y menesteroso del que le despoja?

11. Se levantan testigos malvados;De lo que no sé me preguntan;

12. Me devuelven mal por bien,Para afligir a mi alma.

13. Pero yo, cuando ellos enfermaron, me vestí de cilicio;Afligí con ayuno mi alma,Y mi oración se volvía a mi seno.

14. Como por mi compañero, como por mi hermano andaba;Como el que trae luto por madre, enlutado me humillaba.

15. Pero ellos se alegraron en mi adversidad, y se juntaron;Se juntaron contra mí gentes despreciables, y yo no lo entendía;Me despedazaban sin descanso;

16. Como lisonjeros, escarnecedores y truhanes,Crujieron contra mí sus dientes.

17. Señor, ¿hasta cuándo verás esto?Rescata mi alma de sus destrucciones, mi vida de los leones.

18. Te confesaré en grande congregación;Te alabaré entre numeroso pueblo.

19. No se alegren de mí los que sin causa son mis enemigos,Ni los que me aborrecen sin causa guiñen el ojo.

20. Porque no hablan paz;Y contra los mansos de la tierra piensan palabras engañosas.

21. Ensancharon contra mí su boca;Dijeron: ¡Ea, ea, nuestros ojos lo han visto!

22. Tú lo has visto, oh Jehová; no calles;Señor, no te alejes de mí.

23. Muévete y despierta para hacerme justicia,Dios mío y Señor mío, para defender mi causa.

24. Júzgame conforme a tu justicia, Jehová Dios mío,Y no se alegren de mí.

25. No digan en su corazón: ¡Ea, alma nuestra!No digan: ¡Le hemos devorado!

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