Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Salmos 28:1-9 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

1. A ti clamaré, oh Jehová.Roca mía, no te desentiendas de mí,Para que no sea yo, dejándome tú,Semejante a los que descienden al sepulcro.

2. Oye la voz de mis ruegos cuando clamo a ti,Cuando alzo mis manos hacia tu santo templo.

3. No me arrebates juntamente con los malos,Y con los que hacen iniquidad,Los cuales hablan paz con sus prójimos,Pero la maldad está en su corazón.

4. Dales conforme a su obra, y conforme a la perversidad de sus hechos;Dales su merecido conforme a la obra de sus manos.

5. Por cuanto no atendieron a los hechos de Jehová,Ni a la obra de sus manos,Él los derribará, y no los edificará.

6. Bendito sea Jehová,Que oyó la voz de mis ruegos.

7. Jehová es mi fortaleza y mi escudo;En él confió mi corazón, y fui ayudado,Por lo que se gozó mi corazón,Y con mi cántico le alabaré.

8. Jehová es la fortaleza de su pueblo,Y el refugio salvador de su ungido.

9. Salva a tu pueblo, y bendice a tu heredad;Y pastoréales y susténtales para siempre.

Leer capítulo completo Salmos 28