4. Y he aquí, allí estaba la gloria del Dios de Israel, como la visión que yo había visto en el campo.
5. Y me dijo: Hijo de hombre, alza ahora tus ojos hacia el lado del norte. Y alcé mis ojos hacia el norte, y he aquí al norte, junto a la puerta del altar, aquella imagen del celo en la entrada.
6. Me dijo entonces: Hijo de hombre, ¿no ves lo que éstos hacen, las grandes abominaciones que la casa de Israel hace aquí para alejarme de mi santuario? Pero vuélvete aún, y verás abominaciones mayores.
7. Y me llevó a la entrada del atrio, y miré, y he aquí en la pared un agujero.