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Mateo 16:20-27 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

20. Entonces mandó a sus discípulos que a nadie dijesen que él era Jesús el Cristo.

21. Desde entonces comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén y padecer mucho a manos de los ancianos, y de los principales sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día.

22. Y Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reprenderle, diciendo: Señor, ten compasión de ti mismo. ¡En ninguna manera esto te acontezca!

23. Entonces él, volviéndose, dijo a Pedro: ¡Quítate de delante de mí, Satanás! Me eres tropiezo, porque no entiendes lo que es de Dios, sino lo que es de los hombres.

24. Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz y sígame.

25. Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá, y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará.

26. Porque, ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo y perdiere su alma? O, ¿qué recompensa dará el hombre por su alma?

27. Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.

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