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Lucas 8:15-23 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

15. Pero la que cayó en buena tierra son los que con corazón bueno y recto retienen la palabra oída, y dan fruto con paciencia.

16. Ninguno que enciende una vela la cubre con una vasija ni la pone debajo de la cama, sino que la pone en un candelero, para que los que entren vean la luz.

17. Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado, ni nada escondido que no haya de ser conocido y de salir a la luz.

18. Mirad, pues, cómo oís; porque a todo el que tiene, le será dado; y a todo el que no tiene, aun lo que cree tener le será quitado.

19. Y vinieron a él su madre y sus hermanos; pero no podían llegar hasta él por causa de la multitud.

20. Y le fue dado aviso, diciendo: Tu madre y tus hermanos están fuera y quieren verte.

21. Él entonces, respondiendo, les dijo: Mi madre y mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios y la hacen.

22. Y aconteció un día, que él entró en una barca con sus discípulos y les dijo: Pasemos al otro lado del lago. Y partieron.

23. Pero mientras ellos navegaban, él se durmió. Y se desencadenó una tempestad de viento en el lago, y se anegaban y peligraban.

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