Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Juan 11:43-53 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

43. Y habiendo dicho esto, clamó a gran voz: ¡Lázaro, ven fuera!

44. Y el que había estado muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: Desatadle y dejadle ir.

45. Entonces muchos de los judíos que habían venido a ver a María y habían visto lo que había hecho Jesús creyeron en él.

46. Pero algunos de ellos fueron a los fariseos y les dijeron lo que Jesús había hecho.

47. Entonces los principales sacerdotes y los fariseos se juntaron en concilio y decían: ¿Qué haremos? Porque este hombre hace muchos milagros.

48. Si le dejamos así, todos creerán en él; y vendrán los romanos y nos quitarán nuestro lugar y nuestra nación.

49. Entonces Caifás, uno de ellos, sumo sacerdote aquel año, les dijo: Vosotros no sabéis nada,

50. ni pensáis que nos conviene que un hombre muera por el pueblo, y no que toda la nación perezca.

51. Mas esto no lo dijo de sí mismo, sino que, como era el sumo sacerdote aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la nación;

52. y no solamente por esa nación, sino también para reunir en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos.

53. Así que, desde aquel día convinieron en matarle.

Leer capítulo completo Juan 11