Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Hechos 10:19-33 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

19. Y mientras Pedro pensaba en la visión, le dijo el Espíritu: He aquí, tres hombres te buscan.

20. Levántate, pues, y desciende y no dudes en ir con ellos, porque yo los he enviado.

21. Entonces Pedro, descendiendo a donde estaban los hombres que fueron enviados por Cornelio, dijo: Heme aquí, yo soy el que buscáis. ¿Cuál es la causa por la que habéis venido?

22. Y ellos dijeron: Cornelio, el centurión, varón justo y temeroso de Dios, y que goza de buena fama entre toda la nación de los judíos, ha recibido aviso de un santo ángel de hacerte venir a su casa y oír tus palabras.

23. Entonces, haciéndolos pasar, los hospedó. Y al día siguiente, levantándose, se fue con ellos; y le acompañaron algunos de los hermanos de Jope.

24. Y al otro día entraron en Cesarea. Y Cornelio los estaba esperando, habiendo llamado a sus parientes y a los amigos más íntimos.

25. Y cuando Pedro entró, salió Cornelio a recibirle; y postrándose a sus pies, le adoró.

26. Pero Pedro le levantó, diciendo: ¡Levántate! Yo mismo también soy hombre.

27. Y hablando con él, entró y halló a muchos que se habían reunido.

28. Y les dijo: Vosotros sabéis que está prohibido para un varón judío juntarse con un extranjero o acercarse a él, pero Dios me ha mostrado que a ningún hombre llame común o inmundo;

29. por lo cual, al ser llamado, he venido sin poner ninguna objeción. Así que pregunto: ¿Por qué causa me habéis hecho venir?

30. Entonces Cornelio dijo: Hace cuatro días que a esta hora yo estaba ayunando; y a la hora novena, mientras oraba en mi casa, he aquí, un varón con vestiduras resplandecientes se puso delante de mí.

31. Y dijo: Cornelio, tu oración ha sido oída, y tus limosnas han sido recordadas delante de Dios.

32. Envía, pues, a Jope y haz venir a Simón, el que tiene por sobrenombre Pedro; éste se hospeda en casa de Simón, el curtidor, junto al mar, quien, cuando venga, te hablará.

33. Así que, en seguida envié por ti; y tú has hecho bien en venir. Ahora, pues, todos nosotros estamos aquí en la presencia de Dios, para oír todo lo que Dios te ha mandado.

Leer capítulo completo Hechos 10