Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

1 Pedro 2:18-25 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

18. Siervos, estad sujetos con todo respeto a vuestros amos; no solamente a los buenos y afables, sino también a los rigurosos.

19. Porque esto es elogiable: que alguno a causa de la conciencia ante Dios sufra molestias, padeciendo injustamente.

20. Porque, ¿qué mérito tiene si al pecar vosotros sois abofeteados y lo soportáis con paciencia? Pero si al hacer el bien sois afligidos y lo soportáis con paciencia, esto ciertamente es agradable delante de Dios.

21. Porque para esto fuisteis llamados, pues también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pasos;

22. quien no cometió pecado, ni fue hallado engaño en su boca;

23. quien cuando le maldecían, no respondía con maldición; cuando padecía, no amenazaba, sino que se encomendaba al que juzga justamente.

24. Él mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia. Por sus heridas habéis sido sanados.

25. Porque vosotros erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas.

Leer capítulo completo 1 Pedro 2