Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

1 Corintios 8:6-13 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

6. nosotros no tenemos más que un solo Dios, el Padre, de quien son todas las cosas, y nosotros de él; y un Señor, Jesucristo, por medio de quien son todas las cosas, y nosotros por medio de él.

7. Pero no en todos hay este conocimiento, porque algunos, acostumbrados hasta aquí a los ídolos, comen el alimento como si fuera sacrificado a los ídolos; y su conciencia, siendo débil, se contamina.

8. Si bien el alimento no nos hace más aceptos ante Dios, pues ni porque comamos seremos más, ni porque no comamos seremos menos.

9. Pero mirad que esta libertad vuestra no sea tropezadero para los que son débiles.

10. Porque si alguno te ve a ti, que tienes conocimiento, que estás sentado a la mesa en un lugar de ídolos, la conciencia de aquel que es débil, ¿no será alentada a comer de lo sacrificado a los ídolos?

11. Y por tu conocimiento perecerá el hermano débil por quien Cristo murió.

12. De esta manera, pues, pecando contra los hermanos, e hiriendo su débil conciencia, contra Cristo pecáis.

13. Por lo cual, si la comida le es a mi hermano ocasión de caer, jamás comeré carne para no hacer tropezar a mi hermano.

Leer capítulo completo 1 Corintios 8