2. Y codician los campos y los roban; y casas, y las quitan; así oprimen al hombre y a su casa, al hombre y a su heredad.
3. Por tanto, así ha dicho Jehová: He aquí, yo tramo contra esta familia un mal, del cual no sacaréis vuestros cuellos ni andaréis erguidos, porque el tiempo será malo.
4. En aquel día se levantará contra vosotros un refrán, y se lamentará con triste lamentación, diciendo: Del todo fuimos destruidos; él ha cambiado la heredad de mi pueblo. ¡Cómo nos quitó nuestros campos! Los repartió a otros.
5. Por tanto, no tendrás quien reparta heredades a suerte en la congregación de Jehová.
6. No profeticéis, dicen a los que profetizan; no les profeticen, porque no van a avergonzarse.
7. Tú que te dices casa de Jacob, ¿se ha reducido el espíritu de Jehová? ¿Son éstas sus obras? ¿No hacen bien mis palabras al que camina rectamente?