Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Levítico 22:24-32 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

24. No ofreceréis a Jehová animal herido o magullado, rasgado o cortado, ni en vuestra tierra lo haréis.

25. Ni de manos de hijo de extranjero ofreceréis como el alimento de vuestro Dios de tales animales, porque su corrupción está en ellos; hay en ellos defecto; no se os aceptarán.

26. Y habló Jehová a Moisés, diciendo:

27. El becerro, o el cordero o la cabra, cuando nazca, siete días estará mamando de su madre, pero desde el octavo día en adelante será aceptado como ofrenda de sacrificio encendido a Jehová.

28. Y sea vaca u oveja, no degollaréis en el mismo día a ella y a su cría.

29. Y cuando ofrezcáis un sacrificio de acción de gracias a Jehová, de vuestra voluntad lo ofreceréis.

30. En el mismo día se comerá; no dejaréis de él para el otro día. Yo Jehová.

31. Guardad, pues, mis mandamientos y cumplidlos. Yo Jehová.

32. Y no profanaréis mi santo nombre, porque yo he de ser santificado en medio de los hijos de Israel. Yo soy Jehová que os santifico,

Leer capítulo completo Levítico 22