Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Lamentaciones 3:51-60 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

51. Mis ojos entristecen mi alma por todas las hijas de mi ciudad.

52. Mis enemigos tenazmente me dieron caza como a ave, sin haber por qué.

53. Ataron mi vida en la cisterna y pusieron una piedra sobre mí.

54. Aguas corrieron sobre mi cabeza, y dije: Muerto soy.

55. Invoqué tu nombre, oh Jehová, desde la profunda cisterna.

56. Oíste mi voz; no escondas tu oído a mi clamor, a mi suspiro.

57. Te acercaste el día en que te invoqué; dijiste: No temas.

58. Abogaste, Señor, por la causa de mi alma; redimiste mi vida.

59. Tú has visto, oh Jehová, mi agravio; defiende mi causa.

60. Tú has visto toda su venganza, todas sus maquinaciones contra mí.

Leer capítulo completo Lamentaciones 3