1. Y respondió Job y dijo:
2. ¡Oh, que pesasen bien mi queja y mi tormento, y que se alzasen igualmente en la balanza!
3. Porque pesarían más que la arena del mar; por eso mis palabras han sido precipitadas.
4. Porque las saetas del Todopoderoso están clavadas en mí, cuyo veneno bebe mi espíritu; y los terrores de Dios combaten contra mí.
5. ¿Acaso rebuzna el asno montés junto a la hierba? ¿Muge el buey junto a su pasto?
6. ¿Se comerá lo desabrido sin sal? ¿O habrá gusto en la clara del huevo?
7. Las cosas que mi alma no quería tocar son ahora mi repugnante comida.