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Jeremías 8:12-22 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

12. ¿Se han avergonzado de haber hecho abominación? Ciertamente no se han avergonzado en lo más mínimo, ni aun saben tener vergüenza; caerán, por tanto, entre los que caigan; cuando los castigue, caerán, dice Jehová.

13. Los consumiré del todo, dice Jehová. No habrá uvas en la vid ni higos en la higuera, y se caerá la hoja; y lo que les he dado pasará de ellos.

14. ¿Por qué permanecemos sentados? Reuníos, y entremos en las ciudades fortificadas; y allí guardaremos silencio, porque Jehová nuestro Dios nos ha hecho callar y nos ha dado a beber agua de hiel, porque pecamos contra Jehová.

15. Esperamos paz, y no hubo bien; tiempo de curación, y he aquí, turbación.

16. Desde Dan se oyó el resoplido de sus caballos; al sonido de los relinchos de sus fuertes corceles tembló toda la tierra; y vinieron y devoraron la tierra y su abundancia, la ciudad y a los moradores de ella.

17. Porque, he aquí, yo envío entre vosotros serpientes, víboras contra las cuales no hay encantamiento, y os morderán, dice Jehová.

18. A causa de mi fuerte dolor; mi corazón desfallece en mí.

19. He aquí, la voz del clamor de la hija de mi pueblo desde una tierra lejana: ¿No está Jehová en Sión? ¿No está en ella su rey? ¿Por qué me provocaron a ira con sus imágenes talladas, con vanidades ajenas?

20. Pasó la siega, terminó el verano, y nosotros no hemos sido salvos.

21. Quebrantado estoy por el quebranto de la hija de mi pueblo; entenebrecido estoy; el espanto se ha apoderado de mí.

22. ¿No hay bálsamo en Galaad? ¿No hay allí médico? ¿Por qué, pues, no ha mejorado la salud de la hija de mi pueblo?

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