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Jeremías 26:14-24 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

14. En lo que a mí toca, he aquí, estoy en vuestras manos; haced de mí como mejor y más recto os parezca.

15. Pero sabed de cierto que si me matáis, sangre inocente echaréis sobre vosotros, y sobre esta ciudad y sobre sus moradores, porque en verdad Jehová me envió a vosotros para que dijese todas estas palabras en vuestros oídos.

16. Y dijeron los príncipes y todo el pueblo a los sacerdotes y a los profetas: Este hombre no merece la pena de muerte, porque en nombre de Jehová nuestro Dios nos ha hablado.

17. Entonces se levantaron algunos de los ancianos del país y hablaron a toda la congregación del pueblo, diciendo:

18. Miqueas de Moreset profetizó en los días de Ezequías, rey de Judá, y habló a todo el pueblo de Judá, diciendo: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Sión será arada como campo, y Jerusalén vendrá a ser montones de escombros, y el monte de la casa como cumbres de bosque.

19. ¿Acaso lo mataron Ezequías, rey de Judá, y todo Judá? ¿No temió a Jehová y oró en presencia de Jehová, y Jehová se arrepintió del mal que había hablado contra ellos? Nosotros, pues, haremos un gran mal contra nuestras almas.

20. Y hubo también un hombre que profetizaba en nombre de Jehová, Urías hijo de Semaías, de Quiriat-jearim, el cual profetizó contra esta ciudad y contra esta tierra, conforme a todas las palabras de Jeremías;

21. y oyeron sus palabras el rey Joacim, y todos sus grandes y todos sus príncipes; y el rey procuró matarle; pero Urías lo oyó, y tuvo temor, y huyó y se fue a Egipto;

22. y el rey Joacim envió hombres a Egipto: a Elnatán hijo de Acbor y a otros hombres con él, a Egipto;

23. y ellos sacaron de Egipto a Urías y lo llevaron ante el rey Joacim, el cual lo mató a espada y echó su cuerpo en los sepulcros del vulgo.

24. Pero la mano de Ahicam hijo de Safán estaba con Jeremías, para que no lo entregasen en manos del pueblo para matarlo.

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